¿Cuál es la diferencia entre vapeadores y cigarros electrónicos?

Ambos dispositivos comparten un mecanismo de combustión similar, diferenciándose principalmente en los líquidos que utilizan
0
1084
Cigarro electrónico

En la reciente conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció una iniciativa relacionada con la venta y distribución de vapeadores, generando interrogantes sobre el consumo de estos productos.

El término “vapear” se refiere a la inhalación del vapor producido por dispositivos que contienen líquidos, siendo su principal problemática la presencia de sustancias adictivas como nicotina y “aceites saborizantes.”

La historia de estos dispositivos se remonta a 1963, cuando Herbert A. Gilbert patentó el concepto de cigarro electrónico, inicialmente diseñado para ayudar a superar la adicción al tabaco, pero con el tiempo el consumo se popularizó, evolucionando hacia los vapeadores a partir de la década de 2000.

Aunque se comercializan como alternativas más seguras a los cigarrillos convencionales, estudios sugieren que tanto los vapeadores como los cigarrillos electrónicos pueden tener consecuencias negativas para la salud, como lesiones pulmonares y cáncer.

Diferencias entre cigarro electrónico y vapeador

Las diferencias fundamentales entre vapeadores y cigarrillos electrónicos son los líquidos que utiliza cada uno, así como el tamaño y precio, siendo los vapeadores generalmente más caros.

Ambos dispositivos presentan desafíos para la salud, ya que los líquidos utilizados contienen nicotina concentrada, glicerina, propilenglicol y otros compuestos cuyos efectos a largo plazo aún no están completamente comprendidos.

Sin embargo, el proceso de “combustión” en vapeadores implica hierbas, resinas y otros aceites esenciales, mientras que los cigarrillos electrónicos evaporan completamente los líquidos de su interior.

En términos de tamaño, batería y dificultad de uso, los cigarrillos electrónicos tienden a ser más pequeños, con baterías menos duraderas y más fáciles de utilizar, mientras que los vapeadores son más grandes, con baterías de mayor capacidad y mayor dificultad en su uso debido a los líquidos variados y sabores intensos.

En cuanto al precio, los cigarrillos electrónicos son más asequibles debido a su menor capacidad de líquido y duración, mientras que los vapeadores, clasificados por la cantidad de “puffs” (inhalaciones) tienden a ser más costosos, ya que ofrecen entre 1000 y 4300 “puffs”.

Autor