Desarrollo urbano ordenado, gran oportunidad para el destino
En entrevista, el Mtro. Fernando Castro Rubio, presidente de la Asociación de Empresarios de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas (AEBBA), puntualiza objetivos relevantes para aprovechar las ventajas competitivas del destino turístico y generar las condiciones para que el crecimiento de la región sea de manera ordenada.
Revela en sus palabras su visión como empresario, inversionista y dirigente de esta Asociación y, desde esta perspectiva, vislumbra en su gestión la unidad y colaboración con todos los sectores clave en la construcción de una próspera metrópoli.
En su opinión, ¿Cómo ha incidido la AEBBA en la región?
Favorablemente, los miembros fundadores y quienes han participado y participan activamente en la Asociación, es gente que en común aman al destino y que en Bahía de Banderas – Puerto Vallarta; han colaborado y contribuido en el desarrollo de la región, no solamente en materia urbanística, sino en la promoción turística y eso ha permitido la construcción de lo que hoy tenemos como destino turístico, referente nacional e internacional.
Con base en la filosofía institucional AEBBA, ¿cuál es la visión a futuro?
Es proponer Políticas Públicas para el crecimiento ordenado y el desarrollo de la ciudad para seguir aprovechando las ventajas competitivas que ofrece el destino turístico. Un crecimiento desordenado ocasionaría la pérdida de valor y de competitividad. Tenemos que colaborar y coadyuvar con los municipios, autoridades municipales, estatales y también de índole federal, para que las decisiones de gobierno sean benéficas al destino.
¿Sobre qué objetivos se establece la agenda de trabajo?
Son ejes que, particularmente, la parte de Promoción Turística es fundamental, aprovechar la inercia que se tiene. Segundo, la parte de Seguridad, seguir manteniendo estándares de muy buena percepción que se tenga de seguridad en el destino en toda la Bahía.
El tema de Desarrollo Urbano para que el crecimiento sea sustentable y sostenible de manera que nos permita seguir aprovechando las ventajas del destino.
Y de igual manera en lo Social atender las necesidades y carencias en cuanto a temas sensibles, como son el abuso sexual infantil que son temas que aquejan y pueden dañar gravemente al destino para la llegada y visita de turistas, si no lo atendemos de una manera oportuna.
¿Qué oportunidades se perciben para seguir impulsando el desarrollo y crecimiento económico de la región turística?
Como lo muestra el libro “El desarrollo del turismo en el Pacífico central 1970 -2022 y sus perspectivas geopolíticas” que acaba de publicar el Observatorio Integral Turístico, en 20 años vamos a crecer al doble, es decir que si ahorita tenemos 500 mil habitantes en 20 años serán un millón. Entonces las oportunidades que se generan obviamente son de índole económico, y esto lleva de manera consecuencial el tema del desarrollo urbano, la generación de empleo y las oportunidades para la inversión aquí en el destino. Eso es lo positivo.
Sin embargo, tenemos que desarrollar las condiciones para que esto sea de manera ordenada, porque si el crecimiento se da desordenado lo único que vamos a tener es una ciudad caótica, limitante de recursos y que en lugar de ser benéfico el crecimiento para el destino, va a ser un crecimiento como en otros destinos nacionales, cuyos ejemplos no han sido positivos, sino lo contrario, y terminan por ser historia en cuanto a la promoción turística y al desarrollo turístico, derivado de que no se atendió oportunamente su desarrollo. Esta es quizás la oportunidad más grande que tenemos.
¿Y cuáles serán los principales retos para esta Zona Metropolitana Interestatal?
Primero es el ordenamiento jurídico, es decir, tenemos dos estados, dos municipios, tenemos que homologar las disposiciones normativas para que la planeación urbana sea coexistente y sea consistente, porque al ser dos entidades federativas tienen normatividad distinta y eso impide desde la clasificación, las densidades, las intensidades, y eso limita en mucho el sano desarrollo.
Entonces tenemos que comenzar con la homologación de los reglamentos municipales, inclusive algunas adecuaciones a las leyes estatales para que permitan la homologación en ambos destinos.