Cibercriminales, los otros beneficiados de la IA

La Inteligencia Artificial cada vez gana más terreno en nuestras vidas pues son muchos los beneficios que nos ofrece para nuestras actividades diarias. Desafortunadamente esta herramienta que se ha vuelto de uso cotidiano, también ha sido aprovechada para realizar ciberataques de forma más eficaz, lo que ha obligado a empresas y gobiernos a estar un paso adelante de los delincuentes.

Se prevé que la Inteligencia Artificial se utilice para crear perfiles falsos, mejorar el mensajes de los correos de phishing, además de generar ataques masivos automatizados.

Empresas de seguridad informática como Avast buscan identificar todas las amenazas que la Inteligencia Artificial suponga para los usuarios, como usar sistemas basados en esta tecnología, que pueda aprender de incidentes pasados y adapte nuevas tácticas.

“Los cibercriminales están utilizando los aplicativos de AI para crear identidades sintéticas, es decir que crean una falsa identidad a partir de información desarrollada por una inteligencia artificial como ChatGPT, pero también por otros aplicativos que facilitan la creación de imágenes de personas que realmente parecen humanos, esto les abre la posibilidad de permanecer en el anonimato y cometer distintos delitos”, advirtió Ramón Castillo, especialista en Seguridad de la Información de Forcepoint.

La Inteligencia Artificial y las contraseñas

Gracias a la Inteligencia Artificial el cifrado de contraseñas por parte de los cibercriminales también se ha facilitado, por lo que expertos recomiendan ciertas medidas para asegurarnos de que nuestra información se encuentra resguardada de manera adecuada.

La empresa de ciberseguridad Home Security Heroes encontró que el 51% de las contraseñas pueden descifrarse en menos de un minuto.

Por otro lado, el 65% de ellas podrían descifrarse en menos de una hora, el 71% en menos de un día, mientras que el 81% en menos de un mes de intentos.

Las contraseñas de solo números son las más vulnerables, pues una inteligencia artificial podría descifrarlas en un periodo máximo de 10 meses, solamente si estas tienen 18 caracteres.

Mientras que las más seguras combinan números, letras, además de símbolos; este tipo de contraseñas pueden llegar a superar el umbral de los 95 trillones de años en descifrarse, lo que virtualmente la volvería imposible de descifrar.