Celebran emotiva misa en honor al oficial de Tránsito Jhonatan Rubén Díaz
Familiares, amigos y compañeros del oficial Jhonatan Rubén Díaz se reunieron la tarde de este lunes en la iglesia de la Divina Providencia, en la colonia Aurora, para despedirlo con una misa de cuerpo presente. Díaz, quien se desempeñaba como oficial de Tránsito Municipal de Puerto Vallarta, perdió la vida tras un accidente en la carretera federal 200, dejando una huella imborrable en quienes tuvieron la fortuna de conocerlo.
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El ambiente estaba cargado de nostalgia y pesar. Los asistentes, entre lágrimas y abrazos, esperaron la llegada del féretro, que fue recibido con una solemne valla formada por sus compañeros de trabajo, quienes, con respeto y dolor, le brindaron un último homenaje. A la entrada de la iglesia, el féretro fue bendecido por el párroco, iniciando una ceremonia en la que no faltaron las miradas al cielo y las manos juntas en oración.
Dentro de la iglesia, el silencio solo se rompía por los suspiros y los murmullos de quienes recordaban anécdotas y momentos compartidos con el oficial Díaz. Mientras se oficiaba la misa, sus compañeros de Tránsito montaban guardia en las cuatro esquinas del féretro, un acto simbólico que reflejaba el respeto y el cariño que se había ganado en su tiempo de servicio.
La ceremonia culminó con lágrimas y abrazos entre los asistentes, quienes, pese al dolor de la pérdida, agradecieron haber tenido a Díaz en sus vidas. Al concluir, el féretro fue colocado en una carroza que lo trasladó a la Academia Regional de la Comisaría de Seguridad Ciudadana, donde recibiría un homenaje final.
En cada rostro, entre llanto y consuelo, se reflejaba la tristeza de una despedida que dejó un vacío difícil de llenar.
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