Calor también subió en el Reclusorio, llevan ventiladores
La ola de calor también se siente en el centro penitenciario, donde se encuentra 643 personas privadas de su libertad, entre ellos 63 mujeres, quienes para mitigar las altas temperaturas recibieron ventiladores de un grupo de empresarios, restauranteros y hoteleros, principalmente de la asociación civil “Acciones que Dejan Huella Fundación CMQ, A.C.”, que preside el doctor Jorge Villanueva.
Gustavo Solano López, director del Reclusorio de Puerto Vallarta, dio la bienvenida a las altruistas personas de la iniciativa privada, quienes llevaron cien ventiladores, que se destinaron a las celdas de mujeres y áreas comunes.
“Junto con la colaboración que ha tenido la Dirección General de Prevención y Reinserción Social del Estado de Jalisco, el maestro José Antonio Pérez Juárez, con las diversas organizaciones y fundaciones de Puerto Vallarta, se consiguió hacer un vínculo con los diversos organismos sociales para que se trajera donación de ventiladores para toda la población femenil, en este caso trajeron un poco mas, y se incorporarán los restantes a las áreas comunes, también varoniles, como gimnasios, bibliotecas, talleres y áreas deportivas”, puntualizó.
El evento fue gracias a la iniciativa del colectivo “Resiliencia Violeta”, estuvieron presentes sus integrantes: Valeria Chavarín, Francia Ruiz Samantha Ochoa e Idalia González.
Por parte de las empresarias, tomaron la palabra Guadalupe Bayardi y Alejandra Cornejo, quienes expresaron su respaldo a las internas, señalando su confianza en que aprovecharán su segunda oportunidad de reinserción en la sociedad.
También estuvo el presidente del Consejo Coordinador Empresarial Puerto Vallarta y Bahía de Banderas, Arnulfo Ortega Contreras; Eva Sánchez, de la Asociación Mexicana de Expresidentes Empresariales, AMEXE Vallarta.
“Agradecemos la participación que tienen aquí, y que se de a conocer el buen trabajo que se está haciendo en el Reclusorio”, externó el licenciado Solano López
Las mujeres que pagan una pena en este reclusorio suspendieron sus actividades cotidianas, para convivir en la terraza y con emoción recibieron los grandes ventiladores, agradeciendo la buena voluntad de los donadores.