Una broma incómoda, un beso inesperado y una película independiente en los Oscar 2025
AFP
La 97ª edición de los Premios Óscar no decepcionó: fue una noche llena de sorpresas, emociones y momentos que dejaron a todos hablando.
Desde la alfombra roja hasta el último premio, la gala estuvo marcada por escenas que mezclaron lo icónico, lo polémico y lo inesperado.
Con Conan O’Brien como anfitrión, el evento tuvo un ritmo vibrante, aunque no exento de momentos que generaron risas nerviosas y silencios incómodos.
Todo comenzó con un guiño al pasado en la alfombra roja. Halle Berry y Adrien Brody revivieron el famoso beso que protagonizaron en los Óscar 2003, pero esta vez fue Berry quien tomó la iniciativa, sorprendiendo a Brody con un beso apasionado durante una entrevista.
En 2002, Adrien Brody ganó mejot actor y le dio un beso sorpresa a Halle Berry cuando ganó el premio.
Hoy, en 2025, Halle Berry le dio un beso sorpresa a Adrien Brody, que está de de nuevo nominado a mejor actor. pic.twitter.com/0NVLopIAcz— Pablo Planovsky (@PabloPlanovsky) March 3, 2025
El gesto, capturado por todas las cámaras, se volvió viral en cuestión de minutos, desatando una ola de reacciones en redes sociales que iban desde la diversión hasta el debate sobre si era apropiado o no.
Dentro del teatro, la gala arrancó con un espectacular número musical de Ariana Grande y Cynthia Erivo, quienes interpretaron un tema de Wicked, una de las películas más esperadas del año.
Full performance of “Defying Gravity” by Cynthia Erivo and Ariana Grande at the #Oscars pic.twitter.com/h9flMlgiVI
— Wicked News Hub (@wickednewshub) March 3, 2025
Más tarde, Lisa de BLACKPINK, Doja Cat y Raye, rindieron un tributo a la franquicia de James Bond, dejando al público boquiabierto con su energía y talento.
Pero no todo fue glamour y risas. Conan O’Brien, conocido por su humor ácido, lanzó una broma dirigida a Karla Sofía Gascón, la primera mujer trans nominada a un Óscar por su papel en Emilia Pérez.
Refiriéndose a los tuits polémicos de Gascón que resurgieron días antes de la ceremonia, O’Brien dijo: “Y para los nominados que están preocupados por lo que twittearon hace 10 años… demasiado tarde”.
En cuanto a los premios, la noche estuvo llena de sorpresas. Zoe Saldaña se llevó el Óscar a Mejor Actriz de Reparto por Emilia Pérez, dedicando su premio a las mujeres latinas que luchan por abrirse paso en Hollywood. Su discurso, cargado de emoción, recibió una ovación de pie.
Por su parte, Kieran Culkin, conocido por su papel en Succession, ganó el premio a Mejor Actor de Reparto por A Real Pain, consolidándose como un gran talento a tener en cuenta en el mundo del cine.
Uno de los momentos más graciosos de la noche llegó cuando Adrien Brody ganó el premio a Mejor Actor por The Brutalist. En un gesto espontáneo, el actor le pasó su chicle a su esposa antes de subir al escenario, un detalle que las cámaras captaron y que rápidamente se convirtió en uno de los clips más compartidos de la noche.
Hablemos del lanzamiento de chicle de Adrien Brody a su esposa antes de subir al escenario a recibir su #Oscar pic.twitter.com/UHH6131J6v
— Juanjo Guerrero (@Juanjo_guerrero) March 3, 2025
Pero la gran sorpresa llegó en la categoría de Mejor Actriz. Aunque todas las apuestas estaban puestas en Demi Moore por La Sustancia, el premio fue para Mikey Madison por Anora.
La actriz, visiblemente emocionada, agradeció a Sean Baker por darle un papel que, según sus palabras, “cambió su vida para siempre”. Y hablando de Anora, la película independiente dirigida por Sean Baker fue la gran triunfadora de la noche. No solo se llevó el premio a Mejor Película, sino que Baker también ganó el Óscar a Mejor Director.
MIKEY MADISON ACADEMY AWARD WINNER THAT’S RIGHT pic.twitter.com/mMM9I8eeTT
— Sarah (@sydglenx) March 3, 2025
El cine internacional también brilló. Flow, una película letona, hizo historia al ganar el premio a Mejor Película de Animación, mientras que la brasileña Aún estoy aquí, de Walter Salles, se llevó el premio a Mejor Película Internacional, reafirmando el poder del cine latinoamericano en la escena global.
¿Será que el triunfo de Anora y el reconocimiento al cine independiente marcan el inicio de una nueva era en Hollywood, donde las historias pequeñas pero poderosas comiencen a eclipsar a los grandes estudios?
Solo el tiempo lo dirá, pero lo que es seguro es que los Óscar 2025 dejaron una huella imborrable.
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