Alza en la pobreza
Calíope
La semana pasada el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) informó que la pobreza laboral, el porcentaje de la población con un ingreso por su empleo inferior al valor de la canasta alimentaria, aumentó 3.8 puntos porcentuales a nivel nacional, al pasar de 35.6 por ciento a 39.4 por ciento en el primer trimestre de este año, en comparación con el mismo periodo de 2020.
Aumentó en 26 de las 32 entidades y destacan Ciudad de México con un incremento de 14.9 puntos porcentuales, Quintana Roo con 10.1 y Baja California Sur con 8.3 puntos. Este aumento de la pobreza tiene que ver con la reducción anual de 4.8 por ciento en el ingreso laboral real y el aumento de lo que el Coneval llama las líneas de pobreza extrema por ingresos, esto es el valor monetario de la canasta alimentaria, que fue de 3.7 por ciento en zonas urbanas y de 4 por ciento en las zonas rurales.
La reducción del ingreso laboral real se concentra en el cuarenta por ciento de la población con menos recursos. Sus disminuciones son de 40.8 por ciento para el 20 por ciento más pobre y de 11.5 por ciento para el restante. Además, el 20 por ciento de la población con mayores ingresos tuvo una disminución de 1.5 por ciento.
En el primer trimestre de 2021, el ingreso laboral real promedio de la población ocupada a nivel nacional fue de 4,456.58 pesos al mes. El ingreso laboral mensual de los hombres ocupados durante este periodo fue de 4,787.40 pesos y el de las mujeres, 3,930.86. Lo que indica una brecha entre los ingresos laborales en este trimestre de 856.54 pesos.
En conclusión, según los datos del Coneval hubo un aumento de entre 8.9 y 9.8 millones de mexicanos en pobreza. Se calcula que hay 70.9 millones de pobres por ingreso, es decir el 56.7% de la población.
México se encuentra ubicado en el cuarto lugar de los países que han acrecentado más el porcentaje de personas en situación de pobreza, incluso más que el promedio de América Latina y el quinto que más aumentaría en pobreza extrema entre los países de la región. Estos datos son inquietantes, los efectos de la pandemia se dejan sentir y también los de la inacción del gobierno.
