AL GRITO DE PAZ 3
Foto: Archivo
Mexicanos al Grito de Paz pretende que superemos el miedo sembrado.
Ese miedo fabricado que nos dosifican dÃa con dÃa para inducir nuestra conducta.
Porque el miedo entume; el miedo enmudece. El miedo nos paraliza y nos silencia.
El desamparo es el miedo preferido de los gobernantes en turno. Les encanta machacarnos que, sin ellos, todo es caos y que, con ellos, todo es felicidad y esperanza.
Mexicanos al Grito de Paz te exhorta a que te sacudas ese miedo artificial. Ese peligro imaginario que nos han endilgado a conveniencia.
Los partidos polÃticos y los gobiernos necesitan sembrar miedo para que los ciudadanos perdamos el control de ciertos impulsos y ese control se los dejemos a ellos.
Ellos crean esa barrera que paraliza, bloquea emocionalmente y dificulta la decisión razonada. Altean nuestra conducta.
Todos los polÃticos conjeturan sobre el peligro del pasado, el riesgo de un presente sin ellos y, sobre todo, el terror de un futuro sin ellos.
Necesitan infundir, inocular en nosotros el miedo de su ausencia.
Mexicanos al Grito de Paz te invita a enfrentar sin miedo lo que viene porque es y será tu decisión y de nadie más.
Desterremos de nosotros ese miedo inducido y estimulado; ese miedo aprendido que puede ser desprendido de nosotros.
Revelémonos contra ese miedo social y cultural que nos orilla a querer más de lo mismo.
De nosotros depende eliminar al miedo como arma de dominación polÃtica y como un mecanismo avieso de control social.
Rechacemos los falsos escenarios de inseguridad e infelicidad con los que quieren asustarnos todos los dÃas.
No hubo apocalipsis en el cambio de milenio y tampoco lo habrá si dejamos de seguir a los gobernantes actuales y elegimos perfiles más frescos, vanguardistas e innovadores.
Convirtamos la angustia en alegrÃa y entusiasmo.
Mexicanos al Grito de Paz es un llamado a emocionarnos porque algo grande está por venir.
La gran inteligencia emocional de los mexicanos nos da la seguridad y la certeza necesarias para enfrentar el desafÃo de adelantar el futuro.
¿Usted también lo cree posible?
Esa es una duda sustentable.
