Adán Augusto hasta el cuello: permitió paso libre a migrantes ilegales en Tabasco

Reportes de inteligencia militar revelan que durante su gobierno se facilitó el tráfico de indocumentados en colusión con redes criminales.
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Uno de los hombres más cercanos a Andrés Manuel López Obrador y actual figura clave de Morena, Adán Augusto López Hernández, se encuentra en medio de uno de los escándalos más graves que vinculan al poder político con el crimen organizado.

Documentos del Ejército, filtrados por el colectivo Guacamaya Leaks, lo relacionan directamente con una estructura criminal que operó el tráfico masivo de migrantes durante su gestión como gobernador de Tabasco.

De acuerdo con un reporte del Centro Regional de Fusión de Inteligencia (Cerfi) Sureste, enviado el 20 de diciembre de 2021 y citado por el periódico Excélsior, durante el gobierno de Adán Augusto se permitió que Hernán Bermúdez Requena, su secretario de Seguridad Pública, facilitara el paso diario de entre 80 y 100 migrantes a través de un inmueble conocido como La Casa Azul en el municipio de Cárdenas.

Desde ese punto eran trasladados en lanchas hacia Tonalá, Veracruz, bajo la protección y logística del grupo delictivo Los Panteras.

El documento, contenido en los correos filtrados de la Secretaría de la Defensa Nacional, expone cómo Bermúdez Requena, apodado Comandante H, “autorizó” a Benjamín Mollinedo Montiel, alias Pantera, a controlar los municipios de Huimanguillo y Cárdenas.

La red delictiva no operaba sola: contaba con la complicidad de agentes de la FGR, Tránsito estatal, Pemex, la Guardia Nacional, el Ejército y la Marina, según el informe militar.

Luego de la captura de Pantera en septiembre de 2021, el liderazgo del grupo fue asumido por su hermano Felipe, alias Águila, con aval de Comandante Rayo, un jefe criminal preso en el penal de Las Palmas.

La operación continuó sin freno bajo la misma lógica de impunidad y protección institucional.

La Casa Azul, centro neurálgico de esta red, era administrada por Erika Guadalupe, quien rendía cuentas a Vico, jefe intermedio de Los Panteras, a su vez subordinado de Águila.

El nivel de sofisticación de esta red incluyó incluso vigilancia permanente y rotación sistemática de migrantes, todo sin intervención efectiva de las autoridades.

La radiografía criminal elaborada por la Sedena coloca a Hernán Bermúdez en la cúspide de esta estructura, junto con Rayo, Águila y otros jefes regionales, como La Patrona, exlíder de Los Zetas en Tabasco.

La cadena de complicidades alcanzó al menos a diez funcionarios públicos.

El actual gobernador de Tabasco, Javier May, ha declarado que Bermúdez Requena “tendrá que dar cuenta a la justicia de sus acciones”.

Aunque se ha reunido con Adán Augusto en fechas recientes, asegura no haber hablado con él del tema. Mientras tanto, el secretario de Gobierno de Tabasco, José Ramiro López Obrador, pidió esperar a que la FGR determine si el entonces gobernador estaba o no al tanto de esta operación criminal.

La magnitud de esta red criminal y su operación sistemática durante varios años ha generado cuestionamientos sobre el nivel de conocimiento que pudo haber tenido el entonces gobernador Adán Augusto López Hernández.

Por ahora, será la Fiscalía General de la República la instancia encargada de determinar si existió omisión, negligencia o algún tipo de participación por parte del exmandatario tabasqueño en estos hechos.

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Hugo Lynn