Acusan a tránsitos de Bahía de extorsionar a turistas con “mordidas” de hasta mil dólares
Foto: Especial
Residentes extranjeros en Bahía de Banderas han destapado y denunciado ante Tribuna de la Bahía y CPS Noticias lo que sería una presunta red de corrupción por parte de policías viales.
Afirman haber sido orillados a pagar extorsiones, conocidas coloquialmente como “mordidas”, que van de 500 a 1,000 dólares para evitar ser consignados a las autoridades ministeriales por conducir en estado de ebriedad u otras infracciones de tránsito.
Lo que llama la atención es que los elementos exigen el pago en moneda estadounidense en lugar de pesos mexicanos, con montos que oscilan entre 10,000 y 20,000 pesos. Se habla de una “caza” dirigida a extranjeros, en su mayoría estadounidenses, que residen en el municipio o visitan por temporadas destinos como Nuevo Vallarta y Punta de Mita.
También empresarios y compañías constructoras del municipio aseguran ser víctimas. A sus vehículos de transporte de personal o carga, presuntamente sorprendidos mal estacionados, se les exige hasta 10,000 pesos para evitar ser llevados al corralón. En caso contrario, el costo del arrastre y la permanencia puede duplicar esa cantidad.
Es decir, para muchos “sale más barato” acceder a la “mordida” que pagar entre 18,000 y 20,000 pesos si sus unidades son enviadas al corralón. Algunas empresas han optado por permitir que esto suceda ocasionalmente para evitar represalias de los policías viales, ya que sus vehículos circulan a diario por las calles.
Algunas de estas situaciones ya han sido notificadas al presidente municipal Héctor Santana, pero el problema persiste, lo que ha llevado a los afectados a alzar la voz.
Antecedentes de una presunta red
Cabe recordar que estas denuncias no son nuevas y las autoridades municipales no son ajenas a ellas. La expresidenta Mirtha “N” abordó este tema en septiembre de 2022 durante una reunión con toda la corporación en Valle de Banderas, donde pidió a los policías viales que abandonaran este “vicio”.
En aquel entonces, se hablaba de “cuotas” o “moches”, es decir, que el policía vial cometía la extorsión para después repartir el dinero o reportarse con sus superiores.
Durante el último semestre de su administración, se mencionó la desarticulación de una presunta mafia de agentes viales que extorsionaban a visitantes y residentes en el bulevar Riviera Nayarit. Estos policías identificaban a sus víctimas y las seguían, no para infraccionarlas, sino para exigirles dinero a cambio de no aplicar el reglamento.
Sin embargo, parece que esta red ha retomado fuerza con el cambio de gobierno municipal, o quizá nunca se fue.
jb
