Abandonado el parque arqueológico de Ixtapa
Aunque se declaró zona protegida y hay un decreto de expropiación por la presidencia de la República y el mismo Ayuntamiento lo nombró “Parque Arqueológico Ambiental”, la zona arqueológica de Ixtapa, ubicada al norte de Puerto Vallarta, se encuentra en total abandono por el gobierno municipal, llena de basura, escombro y hasta animales muertos, sin señalamientos, vigilancia, ni limitación.
El área, solo de nombre es protegida, pues sigue siendo destruida, devorada por la mancha urbana y poco valorada a pesar de su importancia histórica y cultural además del potencial turístico que representa; incluso desde hace más de un año un área es usada ilegalmente como criba, lo que en su momento ameritó clausura y se ordenó retirar el material para construcción.
Pero aún siguen ahí los cerros de arena y grava, pegado a un importante montículo donde el arqueólogo Joseph Mountjoy hizo estudios de una estela prehispánica, de lo que fueran pirámides construidas con tierra y cantos rodados, de aproximadamente 10 metros de altura, y que con el tiempo y erosión se convirtieron en montículos.
Pocos vallartenses saben de su existencia, es la huella que dejó aquí la cultura de Aztatlán o de Occidente, que floreció en el año 850 a 1,200 DC, donde han encontrado piezas de cerámica del periodo clásico, sonajas, metates de granito y piedra volcánica, sonajeros, utensilios de moler, navajas de obsidiana e incensarios de copal.
El cronista de la ciudad, Juan Manuel Gómez Encarnación, lamentó: “Yo lo veo mal, mi corazoncito no está contento con esa situación, yo ya quisiera se hubiera resuelto ese problema, porque a medida que pasa el tiempo se va deteriorando”. Pidió resolverlo antes que fallezca el Joseph Mountjoy.
Dijo desconocer cómo se encuentra “la realidad del caso”, pero reiteró le da tristeza el retardo para las indemnizaciones y proyecto de rescate de esta zona tan importante para Puerto Vallarta.
En octubre de 2016, el Ayuntamiento lo declaró “Parque Arqueológico Ambiental”, el cabildo autorizó al alcalde solicitar al Instituto Nacional y Antropología e Historia ((INAH) la entrega en comodato por tiempo indefinido de esa área que consta de nueve hectáreas.
También se intuyó a la Dirección de Seguridad Pública para que apoye en la vigilancia en la zona arqueológica de Ixtapa con el fin de evitar su deterioro. Pero lo cierto a la fecha es que el sitio lamentablemente se encuentra descuidado.
Cabe recordar que las tierras donde se encuentran los principales montículos, aproximadamente 3 hectáreas, aún no las han pagado a sus posesionarios.
Lo que además pone en riesgo se revierta la expropiación. El problema de origen fue, que los ejidatarios de esta superficie ya habían adquirido su dominio pleno y no los incluyeron en el trámite de compra.