Mujeres albañiles se integran a celebración de la Santa Cruz
Por vez primera se visibiliza en la celebración de la Santa Cruz a las mujeres integradas al trabajo de la construcción, dos ayudantes de albañil acudieron al emblemático templo ubicado en la céntrica colonia Emiliano Zapata, llevando a bendecir sus cruces adornadas de flores.
Una de ellas es Romina López, con orgullo dijo ser ayudante de albañilería, señaló que la necesidad la llevó a integrarse a esta pesada labor, misma que en dicho día interrumpieron para asistir a la eucaristía y después con una comida festejar.
“Escogí este trabajo porque tengo familia que mantener. Hacemos mescla, colamos, cargamos grava, arena…es cosa pesada. Mi fe, es cuando el día de la Santa Cruz, bueno son creencias que traemos familiares, es un día respetable esta ocasión, después de aquí vamos a seguir nuestras labores y vamos a comer”.
La Santa Cruz es patrona de los trabajadores de la construcción, por lo que este mediodía llegaron los albañiles, peones e ingenieros, siguiendo la tradición de llevar sus cruces para después instalarlas en lo más alto de las obras donde laboran.
Les apartaron las primeras bancas para ser bendecidos por el padre Esteban Salazar párroco de esta comunidad, en una misa solemne concelebrada por cuatro sacerdotes, presidida por el vicario episcopal Juan José Olmo. El clérigo destacó el símbolo de la cruz que recuerda el máximo acto de amor de Jesucristo que fue morir por los demás.
Algunos de los trabajadores estuvieron acompañados por sus familias. Emocionados compartieron su fe, al revivir esta celebración, en su mayoría llevan 30 o 40 años en el oficio.
Gilberto González es auto constructor:
“Como católicos tratamos de celebrarla religiosamente, nada de lo que se usa ahora normal, en Vallarta estamos solos, mi esposa y yo venimos atraer la crucecita”.
Miguel García es albañil desde hace 30 años:
“Viniendo a misa y dando gracias a Dios por dejarnos trabajar a gusto, sin ningún accidente. Mi esposa adorna la cruz y nosotros la acomodamos en su lugar en la obra, en mi pueblo se acostumbra a echar cuetes”.
Javier Bravo también lleva 40 años de constructor:
“Para nosotros en día que bendice al constructor, le da buena suerte a la obra, para que todo salva bien, toda la gente cerca de Dios y estemos sanos y sin accidentes”.