Keyla y su experiencia como policía de Bahía de Banderas

Keyla Margarita Castro Hernández, joven policía de Bahía de Banderas, compartió con alumnos y académicos de la Universidad Autónoma de Nayarit, su experiencia en unas de las carreras más complicadas, la policial.

En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, externó a los presentes su vocación por salvaguardar a los badebadenses, pero también los sinsabores que como mujeres, les ha traído a ella y a sus compañeras, ser miembros de la corporación policial.

Con más de cuatro años en la corporación, Keyla ha sabido cómo contrarrestar la discriminación, derribar paradigmas y hasta ha tomado el volante patrullando la ciudad, aún contra de quienes se oponen todavía a que una mujer sea policía. 

“Ya tengo cuatro años, ya he ejercido funciones en diferentes áreas, una de estas como lo que todos conocen como patrullaje, me ha tocado patrullar con cada ‘compañero’. Yo creo que aparte de ser policías deben de ser buenos seres humanos, tienen que ser empáticos, tienen que ponerse en nuestro lugar, he tenido compañeros que mis respetos, me han defendido de malos comentarios,” expresó.     

Trabajando actualmente en el área de prevención del delito, ha sabido ganarse el respeto de sus compañeros a base de trabajo, desde abajo pasando en todas las áreas, con un objetivo siempre en mente, servir de mejor manera a la ciudadanía.

“Trato de hacer bien mi trabajo, dejando en claro que el solo hecho de ser policía mujer, no quiere decir que voy a ser menos o que mi trabajo no valga. Yo en lo personal, he tratado de ser mejor persona, de dar un mejor rendimiento y funcionamiento, pero sobre todo brindar un mejor servicio  a la ciudadanía y ellos se quedan como ¡ah caray! Esta compañera es mujer, pero está haciendo su trabajo correctamente,” añadió. 

La oficial concluyó su intervención, pidiendo más sensibilidad al ciudadano, valorar el esfuerzo que cada elemento hace para dar la seguridad al municipio y más que nada, la unión de las mujeres, no tener miedo y hacer lo que les gusta, aún cuando sea una área dominada por los hombres.

Llamó a no quedarse calladas a cualquier tipo de abuso, recalcó que la denuncia es importante y que sólo juntas se puede revertir la historia.