Ofelia Medina y Frida Kahlo se apoderaron de los arcos del malecón

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Con la presentación del montaje escénico “Nuestra Frida” 

  • La puesta en escena formó parte del programa de Mayo Fest y abarrotó el emblemático escenario, enmarcado por un atardecer espectacular

El pasado fin de semana, la primera actriz Ofelia Medina, presentó ante vallartenses y turistas la puesta en escena “Nuestra Frida”, una adaptación de “Cada quien su Frida”, y que sintetiza el arduo trabajo de investigación que su autora ha realizado sobre la pintora Frida Kahlo, basándose en el diario personal de la pintora, incluidas cartas y algunas de sus canciones preferidas.

Ofelia Medina es actriz, directora y dramaturga, originaria de T’Hó, Yucatán, ha destacado desde temprana edad, convirtiéndose en alumna de notables directores, músicos, pintores y escenógrafos. Su profunda admiración por la pintora nació de su relación con los indígenas de la región, del comunismo y del surrealismo.

El espectáculo poético musical fue presentado en el emblemático teatro al aire libre “Aquiles Serdán”, mejor conocido como Los Arcos del Malecón; donde al ritmo de “La tequilera”, “Por un amor” y “El venadito”, la actriz personificó los últimos días de la polémica artista, quien confinada a una silla de ruedas tras haber perdido una de sus piernas, se refugia en la famosa “Casa Azul” de Coyoacán, salvándose a sí misma del suicidio tras considerar que su gran amor, Diego Rivera, la necesitaría a su lado.

En todo momento, la actriz mantuvo cautivo a su público y bromeando incluso, los invitaba a reflexionar sobre el presente, tras incluir en su guion algunas puntadas sobre la situación actual del país. Entre risas, cantos, aplausos y unas cuantas lágrimas, Ofelia se apoderó del corazón de los vallartenses, inyectándoles la nostalgia de los años 50’s, con el sonido de la armónica, las guitarras y las percusiones, acompañando en todo momento a la actriz al interpretar las piezas musicales favoritas de Kahlo, como comparsas de guerra y lucha constante por despertar a la población mexicana de aquel entonces, apropiándose de la cultura y del dolor para convertirlo en una voz de guerra por la democracia.

Poco se notó la sencillez de escenografía que adornó el escenario, pues la grandeza y el talento de los actores rebasaron cualquiera de los elementos que estaban ahí presentes.

Al término de la presentación, el público ovacionó entre aplausos y palabras de agradecimiento, el trabajo de la actriz misma que recibió varios reconocimientos en manos de la directora del Instituto Vallartense de Cultura, Marina de los Santos Álvarez, que a nombre del alcalde Arturo Dávalos Peña, le agradeció por la puesta en escena, así como por la gran contribución al fomento de la cultura en nuestro país y en Puerto Vallarta.

 

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