De nuevo colocan plumas obstruyendo estacionamientos

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La céntrica colonia Emiliano Zapata sigue llena de líneas amarillas, palmetas y más de 140 letreros de “No estacionar”,  en casi todas sus calles, que se supone son para carga y descarga; pero mantienen privatizados estos espacios públicos. 

Es muy grave la problemática que se vive en las calles de este tradicional y turístico barrio, sobre todo en la llamada Zona Romántica, donde prácticamente los particulares y comerciantes ya se apropiaron de todos los espacios junto a las banquetas.

Entrevistado al respecto, Everardo Rubio Ávalos, subdirector de Tránsito Municipal, señaló:

“Todo eso solo, solamente van a poder tener autorizado los que tengan permiso de ascenso y descenso, carga y descarga”.

Incluso volvieron a instalar estructuras tubulares, que atraviesan en la calle como mini plumas, como sucede en la calle Lázaro Cárdenas, entre Ignacio L. Vallarta y Pino Suárez.

Ahí, frente a un spa, colocaron un barandal en el límite de la banqueta y unos barrotes o plumas de fierro, que levantan y ponen con candado para apartar tres cajones o espacios vehiculares. Lo que es ilegal y peligroso.

El subdirector de Vialidad Municipal anunció que revisarán el tema para proceder a retirar esas estructuras:

“Deben estar bien colocadas, junto con Reglamentos, que es el que va a llegar a revisar directamente esos permisos, y si no lo tiene lo vamos a tener que retirar nosotros con balizamiento”.

En la zona hay restaurantes, salones de belleza, veterinarias, farmacias, spa, inmobiliarias, tiendas, boutiques, joyerías y bares. Son algunos de los negocios que han marcado como suyo un pedazo de calle. 

Algunos además apartan con conos, botes o sillas. Hay letreros que sí marcan el número de oficio que les autoriza, otros no; también en unos se lee la amenaza que usaran grúa, otros anotan el horario de privacidad.

 

Autor

  • Miguel González Guerra

    Orgulloso de ser pata salada, nací en la calle Púlpito a una cuadra de la playa Los Muertos y siempre he vivido en Puerto Vallarta. Egresado del Conalep, diplomado de Periodismo en la UNAM, cursé talleres de comunicación en el periódico El Financiero y la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Desde los 14 años trabajé en la rotativa y formato del diario Nuevo Día, en marzo de 1988 publiqué mi primera columna en Vallarta Opina, inicié con las fuentes de sociales y cultura. Laboré en otros dos diarios de la región y una estación de radio. Desde 1991 formé parte de las filas de Tribuna de la Bahía, en diferentes etapas, cubriendo información general, sobre todo las colonias populares, ejidos, delegaciones, iglesias, escuelas y gobierno. Me gusta pintar, leer, el cine, pasear por la naturaleza y pueblear alrededor.

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