Venden supuestas vacunas contra Covid-19 en la dark web

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El Reino Unido se convertirá en el primer país en tener disponible la vacuna contra el coronavirus de Pfizer / BioNTech. De acuerdo con información de ese país, esperan recibir unas 800 mil dosis en los próximos días y otras 10 millones poco después, mismas que se distribuirán en al menos 50 hospitales. Claramente el proceso de desarrollo y la próxima distribución de la vacuna no es simple, aún así en la dark web, ya se están vendiendo.

El portal Vice World News encontró varios proveedores en la web oscura que aseguran estar vendiendo dosis de la vacuna Pfizer / BioNTech a clientes globales por hasta mil 300 dólares la pieza, unos 25 mil 700 pesos. En el anuncio se asegura que pueden entregar en cualquier país. Al menos dos proveedores con los que habló Vice World News, a través de la aplicación Wickr, afirmaron ser farmacéuticos y que adquirieron la vacuna a través del gobierno y que ya la habían vendido a varios clientes.

Uno afirmó tener una reserva de unas 560 dosis. Sin embargo, cuando se les pidió una prueba de sus calificaciones y una fotografía del producto, ambos se negaron. Más tarde, uno de ellos, relata el medio, envió una imagen de archivo de alta calidad de un frasco con la etiqueta “Vacuna contra el coronavirus”.

Siendo la vacuna el objeto de deseo de millones de personas, los ciberdelincuentes están buscando la manera de aprovechar la situación, como ya sucedió en el pasado cuando, también a través de la dark web, algunos afirmaron que vendían sangre de pacientes recuperados de Covid-19 por casi 16 mil dólares el litro (316 mil 500 pesos) pues, prometía a los compradores “una inmunidad de por vida contra el coronavirus”.

Otro ejemplo de este tipo de timos se registró en septiembre cuando otro proveedor en el mismo mercado negro de internet anunció kits de prueba de Covid para el hogar, alegando que había ganado más de 1.4 millones de dólares vendiéndolos a hospitales de escasos recursos. Incluso hay que señalar que en los últimos meses también se han vendido supuestas vacunas, además de remedios, tónicos y otros “medicamentos” para tratar la enfermedad.

No caigas en trampas

Sobre el tema, la Dra. Barbara Mintzes, profesora asociada del Centro y Facultad de Farmacia Charles Perkins de la Universidad de Sydney, dijo a Vice: “Hay tantas banderas rojas aquí que es difícil saber por dónde empezar.

Incluso si una persona está comprando un medicamento recetado o algo como una vacuna en internet siempre está la pregunta de si realmente está obteniendo lo que cree que está obteniendo. No hay absolutamente ninguna garantía”. Además, dijo que el caso es particularmente extraño considerando que la vacuna de Pfizer debe mantenerse a menos 70 grados centígrados.

“En otras palabras no es algo que pueda enviarse por correo, y no está claro cómo exactamente estos vendedores, farmacéuticos o no, están poniendo sus manos sobre el medicamento en primer lugar”.

Es obvio sospechar sobre la veracidad de la vacuna que se vende, lo que significa además un alto riesgo para los posibles compradores pues no pueden estar seguros de lo que introducirán en su cuerpo lo que implica un posible daño en dos frentes: por un lado inyectarse algo que los enferme y, por otro, realizar actividades con la falsa idea de que no es posible contagiarse, lo que eleva muchos los riesgos.

También dijo que, incluso si las “vacunas Pfizer” que se venden en los mercados de la red oscura son verdaderas hay un problema ético y de salud pública a considerar pues, en todo el mundo se está acordando que la vacuna llegue primero a los más necesitados como los ancianos y los trabajadores de salud de primera línea. Asimismo, señaló:

“El problema de dejarla abierta para la venta en el mercado privado es que la situación económica de las personas, su riqueza, determinaría quién recibe la vacuna primero, en lugar de aquellos que más la necesitan”, explicó el Dr. Mintzes. Finalmente la especialista concluyó: “No sé cuántas personas irían realmente a la web oscura para comprar vacunas, pero me suena como el tipo de cosas que realmente necesitan una respuesta regulatoria”.

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