Exrector en Vaticano asegura que nunca supo de abusos sexuales
“Jamás me hablaron de abusos sexuales”, declaró este jueves el padre Enrico Radice, ex rector del pre-seminario San Pio X, durante el juicio por presunta violación a un menor en esa institución localizada dentro del Vaticano.
El religioso, de 71 años, fue convocado por el tribunal de la Santa Sede para testimoniar sobre su labor cuando era rector de la residencia para estudiantes dentro del pequeño Estado del Vaticano.
El “Pre-seminario San Pío X”, que se encuentra no muy lejos de la residencia actual del papa Francisco, era un internado para niños y adolescentes que estudiaban en un colegio privado del centro de Roma y que participaban como monaguillos en las misas celebradas en la basílica de San Pedro.
“Yo me quedaba despierto hasta las 23H00 y 23H30 para asegurarme de que todos los estudiantes estuvieran en sus habitaciones. Las paredes eran delgadas, se podía escuchar todo. Si alguien discutía, yo exigía silencio después de un tiempo”, aseguró Radice, acusado de complicidad por haber protegido al joven autor de los abusos sexuales.
“Nadie me habló de abusos, ni alumnos, ni profesores, ni padres”, se defendió el religioso.
Radice es procesado junto con el padre Gabriele Martinelli, actualmente de 28 años, acusado de haber abusado sexualmente de un menor cuando era un joven seminarista y residía en el pre-seminario, el cual no asistió a la audiencia de este jueves.
La justicia vaticana decidió abrir el juicio tras la publicación del libro “Pecado original” del periodista italiano Gianluigi Nuzzi en el que denuncia los abusos cometidos en ese seminario entre 2011-2012.
Según los informes, el acusado y la víctima tenían 14 y 13 años cuando ocurrieron los hechos, que se prolongaron durante cinco años.
Martinelli, ordenado sacerdote en Como (norte de Italia) en 2017, no compareció a la audiencia porque trabaja en un centro para ancianos en Lombardía, al norte de Italia, la región clasificaba “zona roja” por el elevado contagio de coronavirus, por lo que no pudo viajar.
El joven será interrogado por la justicia vaticana el 4 de febrero.