Virgen lloraba sangre… pero era mentira: descubren engaño en Italia

Foto: Especial
Una estatuilla de la Virgen que “lloraba sangre” atrajo durante meses a cientos de peregrinos a Trevignano Romano, al noroeste de Roma.
Sin embargo, recientes análisis de ADN revelaron que las lágrimas no eran milagrosas: la sangre provenía de la misma mujer que afirmaba recibir mensajes de la Virgen María.
Gisella Cardia, una siciliana de unos 50 años, aseguraba tener estigmas y visiones celestiales.
También afirmaba haber presenciado multiplicaciones de comida, como pizzas y ñoquis, en lo que comparaba con pasajes bíblicos.
El Vaticano ya había desmentido los hechos
En 2024, el Vaticano desestimó oficialmente el carácter sobrenatural de las apariciones reportadas por Cardia.
Pese a ello, los fieles continuaron acudiendo al lugar mes con mes, alentados por su supuesta cercanía con la Virgen.
La exempresaria, que en 2013 fue condenada por quiebra fraudulenta, había fundado una asociación para recaudar donaciones.
Los fondos se obtenían principalmente gracias al entusiasmo generado entre los creyentes que presenciaban los “milagros”.
Pruebas de ADN y denuncias de fraude
La verdad salió a la luz cuando se realizaron pruebas genéticas a cuatro muestras de las supuestas lágrimas.
Todas coincidieron con el ADN de Gisella Cardia, según informes de la prensa italiana. La fiscalía de Civitavecchia abrió una investigación por fraude, mientras que la diócesis inició otra tras recibir múltiples denuncias de los habitantes del pueblo.
Vecinos de Trevignano Romano denunciaron una “estafa gigante” y se quejaron por las constantes aglomeraciones de fieles.