Vecinos disgustados por resultado de puente colgante

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A casi un año de haberse roto, por fin el Gobierno Municipal, concluyó el puente colgante que une la Isla del Cuale con la calle Constitución. Vecinos lamentan que sea diferente al proyecto que les presentaron y con algunos defectos.

Justo a un lado del puente, nació la maestra María del Socorro Garibaldi Mercado, donde ha vivido sus 68 años de vida. Ella ha sido testigo de los diferentes puentes colgantes que han levantado allí, pero este último afectó su casa. 

Recordó el puente cayó el 30 de septiembre del 2019:

”Pero como que les dio mucho trabajo juntar algo de dinerito para hacerlo de nuevo, el 17 de marzo empezaron con los trabajos y terminaron el 25 de septiembre, casi al año, yo ya estaba lista para hacer unas piñatas para festejar su primer aniversario”

Pese al retraso, reconoce lo positivo que lo hayan reparado, “A la mayoría de la gente nos da mucho gusto, nos ahorramos mucho camino, pero hay un detalle, que este puente vino a perjudicar nuestra casa, porque vean como da a nuestro tejado”.

EL PROYECTO ES DIFERENTE AL QUE PRESENTARON

Señaló que ahora elevaron más el puente y construyeron una rampa, que pega con su habitación; además los cables se atraviesan en su puerta, siendo peligroso, y no le han puesto la protección que le prometieron.

Además, en dicho acceso de concreto, dejaron un espacio para herrería en el piso, pero finalmente improvisaron unas tablas de madera sin curar, mismas que ahora están desniveladas y han provocado ya tropezones y accidentes.

Recordó que antes de empezar los trabajos, en obras públicas le mostraron un proyecto muy diferente, por lo que dijo espera con ansias el día que vaya el alcalde a inaugurar, para externar su inconformidad.

“Me enseñaron un proyecto muy bonito, que valía la pena, ahora la realidad es otra…inclusive hasta los ingenieros, vinieron, hasta 10 andaban aquí en joda, pero tantito antes que fueran a dejar la obra, ya no se me arrimó ninguno, se me desaparecieron por completo”, se quejó.

Autor

  • Miguel González Guerra

    Orgulloso de ser pata salada, nací en la calle Púlpito a una cuadra de la playa Los Muertos y siempre he vivido en Puerto Vallarta. Egresado del Conalep, diplomado de Periodismo en la UNAM, cursé talleres de comunicación en el periódico El Financiero y la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Desde los 14 años trabajé en la rotativa y formato del diario Nuevo Día, en marzo de 1988 publiqué mi primera columna en Vallarta Opina, inicié con las fuentes de sociales y cultura. Laboré en otros dos diarios de la región y una estación de radio. Desde 1991 formé parte de las filas de Tribuna de la Bahía, en diferentes etapas, cubriendo información general, sobre todo las colonias populares, ejidos, delegaciones, iglesias, escuelas y gobierno. Me gusta pintar, leer, el cine, pasear por la naturaleza y pueblear alrededor.

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