Bartolo Cruz Romero, director de Sostenibilidad Ambiental del municipio de Puerto Vallarta, descalificó que fuera ecocidio y que tuvieran cien años los tres árboles derribados, en la intersección de las avenidas Fluvial y Rodríguez Barba, en diciembre del año pasado, para “limpiar” un predio destinado a la construcción del nuevo hospital CMQ, tala que generó indignación en la comunidad, ya que representa un grave daño al medio ambiente local.

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“Primero el daño de tres árboles, tampoco son centenarios, son árboles quizá de unos 50 años, arboles nativos, dos higueras y un guamúchil. La empresa responsable de ese proyecto inició con el daño de esos árboles, una vez que se hace la denuncia se da un aviso preventivo por parte de la Dirección de Sostenibilidad Ambiental con base en el reglamento.

Al fin de cuentas ellos iban a continuar con el proceso de su obra, un hospital al parecer, el cual posteriormente una vez que paga por esos daños que se le hicieron a los árboles pues ahora solicita el permiso de tala, que así lo marca el reglamento, única arma que tiene esta dirección para poder llevar a cabo estas acciones y denuncias o atención a la ciudadanía”, explicó.

El biólogo Cruz Romero puntualizó que primero la empresa hizo el daño y después pagó, siendo el siguiente paso es el permiso por tala para continuar con su proyecto:

“El cual viendo que ya estaban dañados los árboles, y era imposible rescatarlos, pues prácticamente se le da el permiso de tala como a cualquier otro ciudadano…Se le aplicaron por ello dos multas; una por haber dañado y otra posteriormente por el permiso de tala…

Desgraciadamente son multas muy pequeñas, fueron cerca de 35 mil pesos, con base con lo que dictaminaron jueces municipales, y si son muy bajas, llegan a costar hasta 5 mil pesos por talar un árbol, y eso es lo que a mi como director de Sostenibilidad Ambiental me inquita, porque ahora si que cada proyecto, por muy millonario que sea, tiene todo el recurso económico para pagar la multa de casi cualquier árbol que esté dentro de su propiedad, esas son situaciones que deberían atenderse a través de las propuestas de las y los regidores”, destacó.

Se deben incrementar las sanciones

Advirtió que los ediles son los que tienen que impulsar incrementar la multa por tala, dijo es muy importante establecer nuevas estrategias para el buen manejo del arbolado urbano, con el propósito de conservar a la mayoría que estén dentro de la zona que pretenden intervenir para desarrollar infraestructura, para que los promoventes le den la vuelta o los integren a su área verde.

Cruz Romero señaló que se puede justificar porque un árbol puede valer hasta un millón de pesos en una zona urbana de Puerto Vallarta, para lo cual pueden integrar variables:

“Por ejemplo cuanto cuesta el metro cuadrado de tierra, cuántos metros cuadrados de sombra te da ese mismo árbol, a qué tipos de animales alimenta, si es fauna en categoría de riesgo como guacamayas, cotorros, pericos, entre otro más”.

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Aclaró que actualmente los proyectos acuden por su firma a Sostenibilidad Ambiental con los planos totalmente concluidos, le dejan poco espacio para dar recomendaciones o adecuaciones para respetar a áreas verdes y servicios ecosistémicos.

EU