¡Pesadilla en la carretera! Mujer denuncia secuestro exprés y extorsión en caseta de Bucerías

Ruby Kitson, de origen vallartense, tras 20 años en Phoenix, Arizona, en Estados Unidos, decidió regresar a la tierra que la vio nacer al ver el deterioro en la salud. Emprendió su viaje en automóvil junto a su esposo desde esa ciudad fronteriza el pasado 10 de febrero, sin imaginar el viacrucis que les esperaba durante su trayecto por los estados de Sonora y Sinaloa. Sin embargo, lo peor estaba por venir al llegar a la caseta de Bucerías, donde se sintió intimidada, privada de su libertad y extorsionada.

De acuerdo con lo narrado por Ruby a Tribuna de la Bahía y CPS Noticias, el peor momento lo vivió en la caseta de Bucerías y en el nuevo tramo al Aeropuerto Internacional de Puerto Vallarta, en la autopista Guadalajara-Puerto Vallarta. Señaló que, por seguridad, solo traían efectivo para pagar las casetas; sin embargo, no calcularon bien y, al llegar a la caseta de La Misión, les faltaban $200 pesos para cubrir el costo total de $455 pesos. Ahí comenzó todo.

Aunque llevaban dólares y tarjetas de crédito, no les permitieron pagar con otra forma que no fuera efectivo y en pesos mexicanos. La encargada del cobro les sugirió regresar y tomar la carretera federal 200, lo cual hicieron, pero al llegar a la caseta de salida en La Cruz de Huanacaxtle se encontraron con otro cobro obligatorio, que consideraron ilógico.

Según Ruby, al explicar que no tenían más dinero en efectivo y que querían salir a la carretera libre, la encargada, un agente de seguridad y otra mujer comenzaron a intimidarlos y a exigirles objetos de valor a cambio del pago. Finalmente, les cambiaron algunos dólares a la mitad de su valor real, tras haberlos retenido por casi media hora, sintiéndose privados de su libertad y extorsionados.

“Ella, un agente de seguridad y otra mujer nos empezaron a intimidar con que teníamos que dejarles algunas pertenencias de valor. Yo le dije: ‘te puedo dejar mi licencia de manejar, esa es invaluable porque sin ella no puedo manejar’. Me dijo que no, que le dejara mi celular, mi iPad o mis lentes de sol.”

“Me dijo que si no les dábamos algo, no podíamos irnos. Cuando empecé a sentir miedo de un secuestro o una aprehensión ilegal, le pregunté al de seguridad cómo podía ayudarme. Me dijo: ‘ven conmigo’.

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Caminamos literalmente dos metros de la supervisora y me dijo: ‘si me das 20 dólares, te doy 200 pesos, lo cual es la mitad del valor de los dólares. Si no, no te puedes ir’. Después de esa última frase, se los di porque no quería averiguar qué exactamente planeaba”, relató.

Ruby Kitson calificó este episodio como la peor experiencia que ha vivido en las carreteras del estado y del país. Además, aseguró que alertará a los turistas estadounidenses que visitan el destino en sus vehículos para que estén prevenidos ante posibles casos de abuso.

AT