Sin respetar sana distancia, celebran a San Miguel en El Pitillal
Este martes se realizaron las fiestas patronales de El Pitillal, en el templo de San Miguel Arcángel, con un programa limitado.
El principal acto fue la misa oficiada por el obispo de Tepic, Luis Artemio Flores, concelebrada por 16 sacerdotes.
A las 12:00 del mediodía aventaron cuetes para anunciar el inicio de la solemne eucaristía; no repicaron las campanas de la torre, pero los feligreses llegaron, visiblemente rebasaron el tope de lo permitido por la pandemia.
Tuvieron que cerrar las puertas, varias personas se quedaron afuera. En el interior, aunque había bancas acordonadas, por protocolos de la sana distancia, en las que sí era permitido sentarse, estaban muy juntos los presentes; eso sí todos con cubrebocas.
NO HUBO PEREGRINACIONES, NI VERBENAS
En primera fila estaban: la delegada municipal, Carmen Santana, así como los representantes del Ejido Coapinole y charros de El Pitillal, entre otros.
El presbítero Francisco Javier Santiago Dueñas, párroco del templo, dio la bienvenida al obispo, autoridades y católicos pitillalenses.
Por primera vez en su historia, se cancelan estas fiestas patronales de la delegación más populosa, siendo una de las mayores tradiciones de la ciudad. En esta ocasión, durante el novenario, solo hubo la celebración de misas de alba, al final daban chocolate y pan para llevar, sin la acostumbrada convivencia.
Se extrañaron las peregrinaciones; tampoco hubo música de banda, danzas, procesiones, carros alegóricos, ni el colorido de las romerías.
En la misa nocturna solamente se recibió la antorcha, que trajeron los corredores desde Mascota.
Tampoco se realizaron los eventos culturales en la plaza, en coordinación con la Delegación Municipal, los cuales quedaron cancelados, al igual la feria y puestos que se instalaban en el corazón de esta demarcación.