Emotivo adiós a doña Carmen Macedo, una vallartense singular

Forjadora de la parroquia de Guadalupe, grupos de apostolado y madre de dos sacerdotes
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Pesar se vivió este fin de semana entre la grey católica y familias del viejo Puerto Vallarta, por el sensible fallecimiento de la señora María del Carmen Macedo Gómez, mamá de los sacerdotes José de Jesús Ulloa Macedo y Julio Ulloa Macedo, quién se distinguió por su trabajo en pro de la emblemática Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, tanto en su construcción como en sus grupos de apostolado, catequesis y coro.

Tras una larga enfermedad y una neumonía, murió la madrugada del sábado 5 de octubre a los 98 años de edad.

Doña Carmen nació el 17 de julio de 1926, en Puerto Vallarta, desde su adolescencia y juventud fue miembro del coro de la parroquia de Guadalupe; fue catequista, perteneció al grupo de la Vela del Santísimo, a la Acción Católica Mexicana, a la familia de las Carmelitas; además de ser de las promotoras de la construcción del templo de Guadalupe, colaborando con su trabajo desde los merenderos y otros servicios.

Fue precursora de la celebración de procesiones a la Virgen del Carmen, por cincuenta años se hizo cargo del Bazar Guadalupano, con cuyas ganancias becó a decenas de seminaristas.

Contrajo matrimonio con el señor Demetrio Ulloa González, quien falleció hace 40 años, con quien procreó 10 hijos, siempre vecina del centro de la ciudad.

El obispo de la Diócesis de Tepic, Artemio Flores, envio un mensaje de solidaridad a su familia, mismo que leyó un sacerdote en su misa de cuerpo presente, realizada en el templo donde creció y recibió todos los sacramentos.

Las Exequias fueron la tarde del domingo 6 de octubre, concelebrada por doce sacerdotes, dónde su hijo el presbítero Jesus Kimis Ulloa recordó con cariño y respeto su obra y anécdotas, al final la bendijo con el altísimo.

Numerosos amigos y familiares se dieron cita para despedirla, con las guitarras y voces del grupo CEC.

Posteriormente se cremara. El lunes 7 de octubre, a media mañana, se le celebrará otra misa con sus cenizas presentes en la Parroquia de San José Obrero, en el Infonavit CTM, en Puerto Vallarta; sus restos serán colocadas en el mismo nicho donde reposa su hijo el Padre Julio, quien falleció el pasado 18 de diciembre.

Autor

  • Miguel González Guerra

    Orgulloso de ser pata salada, nací en la calle Púlpito a una cuadra de la playa Los Muertos y siempre he vivido en Puerto Vallarta. Egresado del Conalep, diplomado de Periodismo en la UNAM, cursé talleres de comunicación en el periódico El Financiero y la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Desde los 14 años trabajé en la rotativa y formato del diario Nuevo Día, en marzo de 1988 publiqué mi primera columna en Vallarta Opina, inicié con las fuentes de sociales y cultura. Laboré en otros dos diarios de la región y una estación de radio. Desde 1991 formé parte de las filas de Tribuna de la Bahía, en diferentes etapas, cubriendo información general, sobre todo las colonias populares, ejidos, delegaciones, iglesias, escuelas y gobierno. Me gusta pintar, leer, el cine, pasear por la naturaleza y pueblear alrededor.

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