Seis años sin su hijo; Doña Amanda también lucha por ver a su nieto
Amanda Álvarez Antúnez, una madre buscadora de la colectiva Ehécatl en Bahía de Banderas, ha pasado por un calvario desde mayo de 2018, cuando su hijo Kevin Yael Rosas Álvarez desapareció en San José del Valle. A su lucha desgarradora por encontrarlo, desde marzo de 2023 se le ha sumado otro dolor: la imposibilidad de ver a su nieto, el “regalo y bendición” que su hijo le dejó. “Me han negado verlo, y desde hace meses vivo un doble suplicio”, confiesa con el alma rota.
Como si no fuera suficiente tragedia, hace pocos meses perdió a su esposo, quien murió sin poder reunirse con su hijo desaparecido ni conocer a su nieto. Amanda, con el corazón hecho pedazos, clama a las autoridades que la ayuden a ver a su nieto para encontrar algo de paz en medio de tanto dolor.
Además de salir incansablemente en la búsqueda de Kevin, la angustia por el bienestar del niño la consume. Amanda denuncia que se le ha impedido ver al menor desde que interpuso una denuncia en la Fiscalía de Nayarit, en el Centro de Justicia de la Mujer (CJM). Afirma que el pequeño ha sido víctima de maltrato por parte de la pareja de su madre, quien lo ha golpeado y hasta quemado con un cigarro de marihuana. “Lo vi con golpes en su rostro y extremidades. Eso no lo puedo soportar”, expresa con desesperación.
A pesar de sus denuncias, Amanda asegura que ha sido víctima de una burocracia inhumana. “Como el agresor es familiar de un policía, no me hicieron caso. La presidenta con licencia, Mirtha ‘N’, me cerró todas las puertas, incluso en la capital del estado. Mi nieto pasó más de un mes en una casa hogar del DIF, pero lo regresaron a su madre”, relata indignada.
“No me escucharon, en el expediente pusieron puras mentiras diciendo que el niño no estaba maltratado. Estuvo un mes y una semana en la casa hogar, desde abril hasta la primera semana de mayo. Se lo regresaron a la mamá, aunque se lo habían quitado por el maltrato. Todo lo hice por mi cuenta, hasta llegar a Tepic, pero aquí, la presidenta Mirtha Villalvazo me cerró todas las puertas”, denuncia con frustración.
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Hace unas semanas, Amanda y otras madres buscadoras fueron recibidas por la actual presidenta, Lía Castro Díaz de León, quien prometió ayudarla y gestionar ante las autoridades estatales para que su caso fuera atendido.
Amanda espera que, tras un año de lucha incansable por ver a su nieto, pueda por fin abrazarlo y disfrutar de él como si fuera su propio hijo. Su corazón lleva seis años esperando el regreso de Kevin, pero mientras tanto, su esperanza está puesta en su nieto, el único lazo vivo con su hijo desaparecido.
