Ya son 4 los cocodrilos en el centro de Vallarta, asombran a turistas

En las ultimas semanas han causado revuelo la presencia de varios cocodrilos en el rio Cuale y el playón de su desembocadura, vecinos preocupados han pedido sean reubicados
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Cocodrilos en Puerto Vallarta

Lejos de reubicar a los dos cocodrilos detectados hace un par de años en la desembocadura del rio Cuale, ahora ya son cuatro los especímenes que han hecho del centro de Puerto Vallarta su hábitat, ante el asombro y miedo de pobladores, turistas y comerciantes que cruzan del malecón a la colonia Emiliano Zapata o pasan por los puentes colgantes de este afluente.

En los alrededores de la Zona Romántica y ribera del Cuale siguen preocupados por el incremento de los cocodrilos en el céntrico rio Cuale, lo cual han reportado a la Dirección de Protección Civil y Bomberos del municipio, sin haber obtenido una solución, como lo señaló la presidenta de la Junta Vecinal de la Colonia Emiliano Zapata, Graciela Ortiz Cervantes.

“Yo he estado reportando, primeramente a Protección Civil tres meses atrás, ellos me hicieron saber que tenían conocimiento de la existencia de un reptil, en su momento me tomé a la tarea de verificar con el apoyo de los vecinos, preocupados porque ya habitan más, tres adultos y uno pequeño, reporté y mandé y videos en su momento, sin lograr respuesta firme, me dijeron que pasaron su reporte a Ecología”, explicó.

Pusieron trampas, pero no han dado resultados

En la Subdirección de Medioambiente la atendió una funcionaria municipal de nombre Maritza, a quién le ha hecho llegar las quejas y fotografías que toman los vecinos de los cocodrilos, ella en primera instancia le respondió que no cuentan ni con señalética para avisar del peligro en el rio y playa donde han observado a los temidos animales.

“Me dijo desde un principio que habían puesto unas trampas, de hecho me mando unas fotos, ignoro cómo funcionan, pero se veían unos hilitos nada mas, supuestamente estaban monitoreadas, también me informa que constantemente los biólogos vienen a checar, pero ninguna especie ha caído a las trampas”, señaló con impotencia la señora Graciela Ortíz, quien vive a dos cuadras del rio.

El río antes era sitio de lavanderas

Cabe recordar que, desde la fundación de Puerto Vallarta, hasta principios de la década de 1980, era parte del paisaje pueblerino ver a las mujeres lavando en el río Cuale, en los alrededores de “la islita” como le llamaban al delta que se forma en su desembocadura, con palapas hacían sombras junto a las enormes piedras donde dejaban limpia su ropa. En todo ese tiempo jamás registraron la presencia de cocodrilos.

Hoy ese icónico punto de la ciudad se ha convertido en un imperdible paseo para los turistas, rodeado ya de condominios, mercado, restaurantes, hoteles e innumerables puestos de venta de artesanías, playeras, ropa típica y otros souvenirs.

Pero hace ya casi cuatro años han alertado de la presencia de un cocodrilo, mismos que se han incrementado, lo que es un peligro para los bañistas principalmente locales, algunos turistas y pescadores que acostumbran a entrar a este sitio.

Restauranteros y prestadores de servicios turísticos del lugar también se han cansado de reportar estos animales a las autoridades, preocupados de que pudiera dañar a alguna persona, pues está en pleno corazón de la ciudad y junto a la popular playa de Olas Altas, donde acostumbran a bañarse numerosos niños y familias, sobre todo los fines de semana, quienes desconocen del peligro que corren.

La presidenta del comité vecinal, Chela Ortiz, reiteró el llamado a que Protección Civil y Bienestar Animal tomen cartas en el asunto, pues la fauna ha crecido descontroladamente en este parque y río, sin tener hasta el momento respuesta efectiva, urge lo capturen y reubiquen.

“Las personas siempre se ha sabido que van a caminar, a nadar, tengo videos donde se están bañando cerca, afortunadamente no ha habido un incidente mayor, pero se trata siempre de prevenir y esos animales están creciendo”, advirtió.

GC

Autor

  • Miguel González Guerra

    Orgulloso de ser pata salada, nací en la calle Púlpito a una cuadra de la playa Los Muertos y siempre he vivido en Puerto Vallarta. Egresado del Conalep, diplomado de Periodismo en la UNAM, cursé talleres de comunicación en el periódico El Financiero y la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Desde los 14 años trabajé en la rotativa y formato del diario Nuevo Día, en marzo de 1988 publiqué mi primera columna en Vallarta Opina, inicié con las fuentes de sociales y cultura. Laboré en otros dos diarios de la región y una estación de radio. Desde 1991 formé parte de las filas de Tribuna de la Bahía, en diferentes etapas, cubriendo información general, sobre todo las colonias populares, ejidos, delegaciones, iglesias, escuelas y gobierno. Me gusta pintar, leer, el cine, pasear por la naturaleza y pueblear alrededor.

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