La importancia de los hubs centroamericanos

Desde que se impusieron soluciones tecnológicas capaces de monitorizar en tiempo real la ubicación de los vehículos, el mundo del transporte y de la entrega se ha revolucionado como pocas veces se hubiera imaginado hace apenas unos años.  

El hecho de gestionar más información y poder interpretarla no solo ha cambiado la forma de operar de las logísticas y empresas de entrega y transporte sino que está siendo todo un filón para los desarrolladores de software que están poniendo sus conocimientos al servicio de la efectividad, seguridad y, sobre todo, ahorro.   Pero, ¿qué soluciones son las más ágiles a la hora de garantizar cierta seguridad a la carga que se distribuye a nivel nacional e internacional?  

Los grandes corredores logísticos que se vienen abriendo en los últimos años en América responden, precisamente, a esa necesidad de apostar por menos importación de otros continentes y más producción relativamente cercana.  

Desde el producto fresco pasando por las materias primas o los productos acabados de salen de cientos de fábricas que finalmente han apostado por producir desde cualquier de los países de Centroamérica, todos han salido beneficiados de  la apuesta corporativa que han hecho desde el mundo del almacén logístico y, también, por qué no reconocerlo, desde las empresas de transporte que han invertido en la digitalización.  

Esto ha llevado a que los operadores conozcan, gracias a la monitorización en tiempo real, no solo dónde se encuentran los vehículos sino el estado de temperatura, humedad y seguridad de su carga gracias a una serie de sensores inalámbricos que emiten la información creando, de forma automática, informes de seguimiento.  

Además, el hecho de que el rastreo de equipos es capaz de mejorar la facturación al ser capaz de arrojar luz sobre las horas de funcionamiento mecánico en los vehículos para llevar la ruta a término, pero también detecta y recupera equipos robados si fuera el caso gracias a su seguimiento y alertas Geofence.  

A esto se suman las alertas de mantenimiento que garantizan que los vehículos que circulan se encuentran en perfectas condiciones para su conducción, habiendo pasado las revisiones necesarias a tiempo y solventar cualquier incidencia – que ahora además queda registrada – a nivel mecánico para garantizar la seguridad de los conductores.  

“Actualmente los softwares están permitiendo mantener la seguridad no solo en cabina, con avisos y alertas en caso de despiste de conductores o problemas en la carretera que requieran de una atención aún mayor. A eso se suman las alertas por cambios de temperatura o situaciones en las que la carga se puede ver comprometida. Todos recursos para garantizar la seguridad, en primer lugar del conductor, y en segundo lugar de los productos” explican.  

Gracias a eso se están generando las sinergias necesarias para que los corredores logísticos estén funcionando a pleno rendimiento teniendo en cuenta las necesidades de las líneas de demanda cada vez más crecientes.  

“El transporte terrestre está siendo clave para conseguir que la cadena de suministro no se vea afectada cuando las importaciones desde otros continentes están teniendo grandes problemas. Es por ello que crear una infraestructura continental, con los principales hubs en Centroamérica está siendo un gran acierto para el comercio, empresas, transporte y, sobre todo, consumidores” comentan.