Vidal Quintero planta arboles y conciencia en nuevos vallartenses

Vidal Quintero de oficio pintor, pero apasionado de la conservación del medio ambiente, es un vallartense ejemplar, que regala su tiempo en plantar árboles y fomentar la conciencia por una ciudad verde en las nuevas generaciones.

Nació en 1948 en El Tuito, cabecera del vecino municipio de Cabo Corrientes, Jalisco, pero se considera más de Puerto Vallarta, pues llegó cuando tenía apenas 5 años, lo que le permitió conocer esta bahía y montañas casi vírgenes. 

Empezó su activismo social en la década de 1970, cuando el entonces Fideicomiso de Puerto Vallarta intervino el cauce del río Cuale, para el proyecto de la Isla de Los Niños, afectando la fauna y flora del área.

Lamentó que ahora más bien parezca la Isla de los Gatos, pues han mermado especies silvestres como garzas, nutrias, ardillas y camarones, que antes abundaban en la desembocadura del afluente. Reconoció que, en las últimas semanas, el Instituto Vallartense de Cultura, ha dado mantenimiento a este parque público.

“Mi trabajo es pintar y decorar casas, restaurantes, hoteles, al estilo típico de Vallarta… entonces sábados o domingos que no hay nada nos juntamos dos tres personas para reforestar”, compartió con satisfacción.

Perteneciente al Grupo Ecológico de Puerto Vallarta, A.C., su más reciente tarea fue plantar una parota en la cuchilla que se forma en el Libramiento, pasando el túnel grande, en su entrada al Par Vial que conecta con el Centro de la Ciudad.

Junto con otros compañeros limpiaron el espacio, donde espera pronto crezca el enorme árbol, también plantaron dos magueyes. Antes también ayudó a reforestar la ribera del Río Pitillal y otros muchos puntos de la ciudad.

Reiteró la importancia de inculcar a los niños el amor a su tierra y no ensuciar, lo cual no debe tener bandera política, más que las ganas de preservar la naturaleza.

“Los padres también tienen que  participar,  sino los niños solo pasan metidos en el internet, ellos son el futuro de Vallarta, los vallartenses debemos estar orgullosos de vivir en un lugar privilegiado en todos los aspectos, no cualquier municipio tiene su belleza natural, los tornados y huracanes no pasan, estamos benditos de Dios”, destacó Vidal.