“Te estamos esperando 2024”

0
263

El presidente en turno de 2018 a 2024, dada la votación que lo apoyó y teniendo las dos cámaras a su favor, podía haber hecho varios planes a 8 o 10 años, manteniendo su popularidad y la seguridad del seguimiento de proyectos que hubieran sido realizados con mayor cuidado y no con el atropello con el cual se han realizado los proyectos “emblemáticos” de este régimen.

Si López Obrador fuera un estadista con una visión de futuro, hubiera realmente cambiado el país, con toda la fuerza que generó, pero mal orientada a la fecha, con números negativos en la mayoría de actividades, por incapacidad de planeacion y obsesión por el poder.

De los tres proyectos del régimen, dos en proceso y uno terminado, sin estudios previos, con presupuestos y resultados han sido completamente fallidos, con los resultados a la vista.

El AIFA es un fracaso operativo, económico y de planeación derivado de una mala decisión de cancelar el aeropuerto de la CDMX en proceso, costando miles de millones de pesos esa decisión equivocada y visceral.

El tren maya y dos bocas siguen el mismo esquema de decisiones sobre las rodillas, sin saber cuanto van a costar y como y cuando van a operar.

Estos proyectos pudieron ser proyectados en una forma mucho más profesional y no necesariamente terminarlos en dos o tres años. Podrían haber sido proyectos a mediano plazo, con buenos estudios previos, presupuestos reales con una clara continuidad y no necesariamente terminarlos en un sexenio.

Eso hubiera ayudado a no descuidar temas como salud, medicinas , educación, apoyo a municipios, arte y cultura, y sobre todo seguridad, cuyos resultados han sido nefastos.

La realidad es que lo único que se ha logrado con esta administración es un país dividido, encrespado, el gobierno en contra de los mexicanos, pesimismo en el futuro e indignación de las clases productivas por tantas mentiras, impunidad y corrupción y asegurando una “transformación”.

La razón es que López Obrador no es un hombre de estado, es  un maestro en la manipulación con todo el poder que tiene y sus seguidores es la clase más oprimida del país, sin preocuparse por su superación, dándoles una ayuda muy loable, pero que se usa como compra de votos.

Esperemos que el próximo presidente sea diferente, que no nos sature con su presencia y que hable menos y haga más.

“tTe estamos esperando 2024”

Autor

EtiquetasAMLO